La campana de Huesca: 34

Capítulo XXXIII 34 Pág. 34 de 35 La campana de Huesca Antonio Cánovas del Castillo Que trata de cosas místicas; es quizá más que ninguno gustoso, por ser el último de los que escribió el mozárabe Pourquoy fus ie mis en ce monde Pourquoy ay ie prebistre Fortune Divant de vince tres immunde. «Les grans regretz du Prebistre Fortune, par avarice». (Decir francés) Mea culpa, mea culpa, mea gravísima culpa. Ya el lector inteligentísimo habrá comprendido por qué fue la extraña desaparición de Aznar, de que dimos cuenta en el capítulo XXVIII de esta verídica historia. El cronista mozárabe suele hacer cosas como esta, que es dejar de explicar los sucesos cuando tienen lugar; y luego, al cabo de tiempo, hacer de modo que mal o bien se entiendan, sin ponerse a decirlo claramente. Así debe de suceder ahora con el rey don Ramiro, pues dice que acabado el juicio de Dios salió del palenque, sin saber nadie...

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