La campana de Huesca: 23
Capítulo XXII 23
Pág. 23 de 35
La campana de Huesca
Antonio Cánovas del Castillo
Cómo Dios trae consuelo y ayuda a las dueñas menesterosas
-Manténgavos Dios, señor;
adalides bien vengades:
pues ¿qué nuevas me traedes
del campo de Palomares?
-Buenas las traemos, señor,
pues que venimos acá...
que nos pesó o que nos plugo
hobimos de pelear:
los cuatro de ellos matamos
los tres traemos acá.
(Romance viejo)
La crónica no dice, al fin, cómo ni cuándo se acabó esta plática de Roldán con Férriz de Lizana. Pero es natural que se acabase pronto, porque la fatiga de Roldán era grande, de modo que apenas podía tener sobre sí el peso de la armadura; y es también natural que no se separasen los dos sin quedar satisfechos y agradecido el mozo con las sabias lecciones del viejo, por más que a él le costase algún trabajo participar de sus recelos y temores.
Como era galán, aunque viejo y compasivo, aunque hijo de...
Está viendo el 4% del contenido de este artículo.
Solicitud de acceso
Solicite el acceso a su biblioteca para poder consultar nuestros recursos electrónicos.
Ventajas de ser usuario registrado.
ACCESO COMPLETO
Acceso sin restricciones a todo el contenido de la obra.
SIN PUBLICIDAD
Sólo información contrastada de prestigiosos sellos editoriales.
ACTUALIZACIÓN
Contenidos de renombrados autores y actualizaciones diarias.
La nueva plataforma del Consorcio ofrece una experiencia de búsqueda de fácil manejo y de gran usabilidad. Contiene funciones únicas que permiten navegar y realizar consultas de manera ágil y dinámica.
Convenios especiales:
Enseñanza
Bibliotecas públicas