... , hasta confinar con los países bárbaros cuya situación exacta es desconocida.Antes de la época de los Incas, habitaba el país una raza de civilización avanzada, originaria de los alrededores del lago ...
... re cadenas, para conmover su compasión con su ardiente llanto. Coya, ilustre princesa de la sangre de los Incas, aquella hermosa Coya que tanto amor inspiró al gallardo y gentil Almagro, no había sido ...
... . Hemos observado también el terror religioso con que miraban los peruanos a la familia y raza de los Incas, porque como descendientes de Manco Capac y Mama-Ocollo, eran hijos del Sol, hijos del Dios ...
... frente a un superior, podía contar con la justicia del soberano. El quechua, la lengua de los incas, era obligatorio para todos. Una red de 16.000 kilómetros de caminos, puentes, sitios de refrigerio ...
... que habían encontrado al mismo tiempo, y los preciosos adornos encontrados en los cadáveres de los nobles incas que habían perecido en la matanza fueron puestos a buen recaudo.Pizarro habría marchado ...
... como esposa, ya que tanto tiempo hace poseo su corazón. Como monarca del Perú, como jefe de la familia de los Incas, otórgame este don, y mis cortos servicios por la causa del imperio serán altamente ...
... antiguo camino al Gran Paitití, el reino portentoso a que se habían tirado los Incas con sus ingentes riquezas; la Ciudad de los Césares caería también en sus manos... Pero había que tener paciencia ...
... homenaje. El príncipe de Quito no dudó ya más en ceñir la borla escarlata, la diadema de los Incas. Su triunfo era completo. Había vencido a sus enemigos en su propio territorio, se había apoderado ...
... re cadenas, para conmover su compasión con su ardiente llanto. Coya, ilustre princesa de la sangre de los Incas, aquella hermosa Coya que tanto amor inspiró al gallardo y gentil Almagro, no había sido ...
... extendida setenta leguas más al sur y podía creer, como Almagro, que la capital de los Incas no se hallaba situada legalmente dentro de su territorio. Dándose cuenta de todo el daño que le causaría ...
... las cercanías de Porco, cuyas productivas minas habían sido parcialmente explotadas por los Incas. Fernando reconoció la riqueza de aquel terreno y empezó a explotar las minas a una escala más vasta ...
... años después, Francisco Pizarro y Diego de Almagro conquistan para España el imperio de los Incas. En 1550 es descubierto el Amazonas, fundado Chile y explorado el Río de la Plata. Más de las tres ...
... los torrentes de oro, de sudor y de sangre, que arrebataron a los adoradores del Sol, a los súbditos de los Incas, a los desgraciado habitantes del Nuevo Mundo. La Conquista del Perú de Pablo Alonso ...
... tesoro a quien concurriese con él a extraerlo del escondido antro en que yacía desde el tiempo de los señores Incas. No quería comunicar el secreto al Gobierno de Chile. Como buen español aguardaba ...
... misión en el Perú.Francisco Pizarro y La Conquista Del PeruIntroducción - I. La civilización de los Incas - II. El descubrimiento del Perú - III. La captura del Inca - IV. La insurrección general ...
... . Al asaltar Pizarro los débiles muros de Cuzco, señoreó los confines del vasto territorio de los Incas; el terror tendió sus alas sobre el Perú, el pendón de la cruz tremoló vencedor sobre las ruinas ...
... Amaru (el primer Tupac Amaru, ajusticiado en 1572, había sido el último de los incas del estado independiente de Vilcacamba) constituyó una extraordinaria explosión de violencia. El jefe de dicha ...
... presentase en Cuzco.Gonzalo no consideró prudente desobedecer y entró en la capital de los Incas al frente de un cuerpo de jinetes bien armados. Fue admitido inmediatamente a presencia del gobernador ...
... sacar un nuevo inmortal triunfo en Maipú; aquel que con 4.000 bravos invadió el imperio de los incas, y, a pesar de innumerables huestes, a pesar de un clima destructor, entró vencedor en la capital ...
... antiguo camino al Gran Paitití, el reino portentoso a que se habían tirado los Incas con sus ingentes riquezas; la Ciudad de los Césares caería también en sus manos... Pero había que tener paciencia ...
1.647 palabras
Este sitio web utiliza cookies, propias y de terceros con la finalidad de obtener información estadística en base a los datos de navegación. Si continúa navegando, se entiende que acepta su uso y en caso de no aceptar su instalación deberá visitar el apartado de información, donde le explicamos la forma de eliminarlas o rechazarlas.
Aceptar |
Más información