... de tu libro,Oh Juan ¡Reposad,Reposad, astros ¡Que el autómata vaya a retorcer su corbata de cáñamo El magnético imán desanuda los glaciares de la auroraboreal.Es la horaEn que el ángel reposa ...
... que desarraigase un algarrobo añoso que ya no daba hojas ni fruto. Se ajustó, pues, un cinturón de cáñamo, se levantó las mangas, cogió una azada y un canasto, y puso inmediatamente manos a la obra ...
... campesinode Pedro Antonio de Alarcón - I -El Tiempo es la primera materia de la vida: y así como el cáñamo (verbigracia) les sirve a unos industriales para hacer alforjas, a otros para velas de barco ...
... o Homero, de verdad queno le fuera inferior.Resonaba mucho y embarazaba a muchos un instrumento que unieron cáñamo y cera.Parecía órgano por lo desigual y era compuesto de las cañas de Siringa cogidas ...
... hay que hablarles, dice, de la cuerda que tienen al cuello; aunque están llenos de recelos del cáñamo que apunta en el campo. ¿Qué han hecho las Cortes, qué han adelantado en este importantísimo ...
... todos venía un castillo de madera, a quien tiraban cuatro salvajes, todos vestidos de yedra y de cáñamo teñido de verde, tan al natural, que por poco espantaran a Sancho. En la frontera del castillo ...
... los países escandinavos: importaban cereales, carnes saladas, pieles, lanas, lino, cáñamo, maderas de todas las calidades, y hierro y cobre de las minas suecas, revendiendo después estas mercancías ...
... la guarnición de la fortalezahaya recibido gratificación de vino; tendrás tres cuerdasde seda y cáñamo, del grueso de una pluma de cisne. Laprimera, de ochenta pies, te servirá para bajar los treinta ...
... Cromarty, que conocía los efectos de la embriaguez, producida por la inhalación de los vapores del cáñamo, no abrigaba inquietud alguna.Pero si el restablecimiento de la joven india no inquietaba ...
... ALLde la Verde Floresta y sus alegres compañerosÍtem más: tenemos más flechas y buenas cuerdas de cáñamo para otros secuaces vuestros.-¡Malos tiempos para la caridad y el perdón cristiano -exclamó ...
... gritó de nuevo‑: ¡Vengo a expulsar a los demonios Una cuerda ceñía a su cintura su burdo hábito. Su camisa de cáñamo dejaba ver su velludo pecho. Iba descalzo. Apenas agitó los brazos tintinearon ...
Zumalacárregui& 160;: 12de Benito Pérez Galdós Llegaron por all& 237; dos mujeres que Fago no vio con buenos ojos. No tem& 237;a de ellas la traici& 243;n deliberada, sino la infidencia inocente, por ...
... , embozada y la más ricamente vestida que ser pudiere; traen la rienda dos salvajes, vestidos de yedra o de cáñamo teñido de verde; detrás viene una dueña sobre una mula con gualdrapa: trae delante ...
... el grato olor a brea de sus botas recias y el fresco aire invernal, con mandil de cáñamo y limpia camisa de percal de mangas remangadas sobre sus fuertes y juveniles brazos desnudos, y sin mirar ...
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... , embozada y la más ricamente vestida que ser pudiere; traen la rienda dos salvajes, vestidos de yedra o de cáñamo teñido de verde; detrás viene una dueña sobre una mula con gualdrapa: trae delante ...
... de olivos, almendros y vides lozanas; en las vegas verdeaban los opulentos plantíos de trigo, cáñamo, y de cuanto Dios ha criado para la industria, así como para el sustento de hombres y animales ...
... lanzaba gritos inarticulados, Kamaralzamán le dijo: "¡Aguarda un poco " Y corrió a buscar la soga de cáñamo que servía para sacar el agua del pozo, se la pasó al esclavo por debajo de los sobacos ...
1.245 palabras
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