Sexto Libro de La Galatea: 12

CANTO DE CALÍOPE Al dulce son de mi templada lira, prestad, pastores, el oído atento: oiréis cómo en mi voz y en él respira de mis hermanas el sagrado aliento. Veréis cómo os suspende, y os admira, 5 y colma vuestras almas de contento, cuando os dé relación, aquí en el suelo, de los ingenios que ya son del cielo. Pienso cantar de aquellos solamente a quien la Parca el hilo aún no ha cortado, 10 de aquéllos que son dignos justamente d’en tal lugar tenerle señalado, donde, a pesar del tiempo diligente, por el laudable oficio acostumbrado vuestro, vivan mil siglos sus renombres, 15 sus claras obras, sus famosos nombres. Y el que con justo título meresce gozar de alta y honrosa preeminencia, un don ALONSO es, en quien floresce del sacro Apolo la divina sciencia; 20 y en quien con alta lumbre resplandece de Marte el brío y sin igual potencia, DE LEIVA tiene el sobrenombre ilustre, que a...

Este sitio web utiliza cookies, propias y de terceros con la finalidad de obtener información estadística en base a los datos de navegación. Si continúa navegando, se entiende que acepta su uso y en caso de no aceptar su instalación deberá visitar el apartado de información, donde le explicamos la forma de eliminarlas o rechazarlas.
Aceptar | Más información