Odisea: Canto XII

Odisea Canto XII: Las sirenas. Escila y Caribdis. La Isla del Sol. Ogigia. de Homero 1.12 Tan luego como la nave, dejando la corriente del río Océano, llegó a las olas del vasto mar y a la isla Eea -donde están la mansión y las danzas de Eos, hija de la mañana, y el orto del Helios-, la sacamos a la arena, después de saltar a la playa, nos entregamos al sueño, y aguardamos la aparición de la divinal Eos. 8 Cuando se descubrió la hija de la mañana, Eos de rosáceos dedos, envié algunos compañeros a la morada de Circe para que trajesen el cadáver del difunto Elpénor. Luego cortamos troncos y, afligidos y vertiendo abundantes lágrimas, celebramos las exequias en el lugar más eminente de la orilla. Y no bien hubimos quemado el cadáver y las armas del difunto, le erigimos un túmulo, con su correspondiente cipo, y clavamos en la parte más alta el manejable remo. 16 Mientras en tales cosas nos ocupábamos, no se le encubrió a Circe nuestra llegada del Hades, y se...

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