Nazarín : 32

NazarínQuinta Parte Capítulo IV de Benito Pérez Galdós Quinta Parte IV En cuanto se juntaron mujeres y hombres, ya de día claro, para proseguir el triste viaje, Beatriz y su compañera corrieron a ver a Nazarín, y a informarse de cómo había pasado la noche. No hay que decir la amargura hondísima que les causó ver en su venerable faz señales de golpes, magulladuras horrorosas en brazos y piernas, y en todo él un triste decaimiento. La de Móstoles se puso lívida, y en su turbación, no acertó a preguntarle quién había sido el autor de tan monstruosa barbarie. La de Polvoranca se retorcía los brazos cual si tuviera ligaduras y quisiese romperlas; apretaba los puños y rechinaba los dientes. La caravana se puso en marcha en el mismo orden que el día anterior, sólo que Nazarín llevaba de la mano a la niña, y a Beatriz a su lado, y Ándara iba delante con el viejo. Este la informó de lo ocurrido la noche anterior en el departamento de hombres. «Del principio de...

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