Nazarín : 30

NazarínQuinta Parte Capítulo II de Benito Pérez Galdós Quinta Parte II «Pues por el perdón, toma -le dijo otra vez el Parricida, pegándole, aunque menos fuerte. -Y por el desprecio, toma. Y todos, menos uno, cayeron sobre él, y le golpearon, entre risas burlescas, en la cara, en el cráneo, en el pecho y hombros. Más que crueldad y saña, revelaba aquella acometida en conjunto una burla pesada y brutal, de gente zafia, porque los golpes no eran fuertes, aunque sí lo bastante para poblar de cardenales el cuerpo del infeliz sacerdote. Este, luchando en su interior con más bravura que la primera vez, invocando a Dios fervientemente, llamando a sí todo el vigor de sus ideas, y atizando el fuego de piedad que ardía en su alma, se dejó pegar, y no articuló protesta ni lamento. Cansáronse los otros de su infame juego, y le dejaron tendido, exánime sobre las losas. Nazarín no profería palabra alguna: oíase tan sólo su fatigosa respiración. Los criminales callaban...

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