Los condenados: 16

Los condenados de Benito Pérez Galdós Escena XIV GASTÓN, BARBUÉS y los dos mozos, a la izquierda; JOSÉ LEÓN, en el centro derecha; FELICIANA, al extremo derecha; PATERNOY, trayendo de la mano a SALOMÉ, pasa al centro. PATERNOY.- Ven, no temas. SALOMÉ.- (¡La Virgen sea conmigo!) (Sin atreverse a levantar del suelo los ojos.) GASTÓN.- (A BARBUÉS.) ¡La muy bribona... con esa cara de inocencia... engañarme así! BARBUÉS.- (A GASTÓN.) Lo que digo, Jerónimo. A estos ángeles, desde chiquitos, se les va enseñando con una vara. PATERNOY.- Hija mía, ¿amas la verdad? ¿Comprendes que diciéndola en ocasiones tan solemnes como ésta se sirve a Dios? SALOMÉ.- (Temblando.) Sí y señor, amo la verdad. FELICIANA.- ¡Infeliz, cómo tiembla! JOSÉ LEÓN.- (Sugiriéndole, aparte.) ¡Alma mía, ten valor! ¡La verdad, la verdad pura! PATERNOY.- Bien. Todos saben aquí que te hice proposiciones de casamiento. Nunca me respondiste con la claridad que yo...

Este sitio web utiliza cookies, propias y de terceros con la finalidad de obtener información estadística en base a los datos de navegación. Si continúa navegando, se entiende que acepta su uso y en caso de no aceptar su instalación deberá visitar el apartado de información, donde le explicamos la forma de eliminarlas o rechazarlas.
Aceptar | Más información