Los Ayacuchos : 36

Los Ayacuchos Capítulo XXXVI de Benito Pérez Galdós Antes de salir de Logroño, fue asaltado D. Fernando de ideas tétricas. Recapitulando en su memoria los incidentes de la captura de Ibero y el largo viaje, se decía: «Este séptimo trabajo que mi mujer me impuso ha resultado tan fácil, que debemos dudar de su desenlace lisonjero. No he tenido que afrontar peligros, ni que dar batallas, ni que vencer obstáculos serios de la Naturaleza y de los demás hombres. Si después de tantas felicidades, llegáramos al fin del trabajo viendo realizado todo lo que apetecíamos, se alteraría el orden natural de las cosas humanas. Me apoderé de Santiago con la más tonta y rudimentaria de las maniobras; nadie me persiguió; ningún impedimento me ocasionó molestias; fácilmente también vi al pobre enfermo del alma renacer a la vida y a la razón, declarándome sus errores y disponiéndose a enmendarlos. En fin, que el hombre fue mío, y pude modelarlo entre mis dedos y hacer de...

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