Los Ayacuchos : 24

Los Ayacuchos Capítulo XXIV de Benito Pérez Galdós De D. Fernando a Demetria Sitges, Octubre. Turris eburnea: Llego de Barcelona echando venablos y maldiciendo de los enfadosos clérigos de San Quirico, que después de hacerme detener tres días más de lo que pensaba, salen con la gaita de que el educando y corrigendo D. Santiago no vuelve de Ripoll hasta fin del corriente, porque el preste, rector, o sacripante mitrado de allá le señala mayor suma de ejercicios, sin duda para embrutecérnosle más de lo que está. Esto no se puede sufrir, esto es burlarse de todas las leyes divinas y humanas... Perdóname: no sé lo que me digo. Me ha consolado de estos berrinches tu amorosa carta, y lo más bonito de ella es tu conformidad, en principio, con la idea nuestra de que os vengáis acá. ¡Bendígaos Dios, oh excelsas niñas de Castro! Me contraría la reserva de que no te determinas a emprender la marcha sin que haya motivos en que fundar esperanzas razonables de la...

Este sitio web utiliza cookies, propias y de terceros con la finalidad de obtener información estadística en base a los datos de navegación. Si continúa navegando, se entiende que acepta su uso y en caso de no aceptar su instalación deberá visitar el apartado de información, donde le explicamos la forma de eliminarlas o rechazarlas.
Aceptar | Más información