Las mil y una noches:558

23/10/2009 1.174 Palabras

Las mil y una noches - Tomo IV Pero cuando llegó la 559ª noche de Anónimo PERO CUANDO LLEGO LA 559ª NOCHE Ella dijo: "... Tras de pensar así, Califa no dudó ya más, y puso en ejecución el proyecto que le sugería su alma de tragador de haschich. Se levantó, pues, al instante, se quedó completamente desnudo, y cogió una almohada de piel que tenía, y la colgó de un clavo frente a él en la muralla; luego, asiendo un látigo de ciento ochenta nudos, empezó a dar alternativamente un latigazo en su piel y otro latigazo en la piel de la almohada, y a lanzar al propio tiempo grandes gritos, como si ya estuviese en presencia del jefe de policía y se viese obligado a defenderse de la acusación. Y gritaba: "¡Ay! ¡Ay! ¡Por Alah! que es mentira, mi señor! ¡Una mentira manifiesta! ¡Ay! ¡Uy! ¡Palabras de perdición contra mí! ¡Oh! ¡Oh! ¡Con lo delicado que soy! ¡Todos embusteros! ¡Yo soy un pobre! ¡Alah! ¡Alah! ¡Un pobre pescador! ¡No poseo nada! ¡Uy!...

Este sitio web utiliza cookies, propias y de terceros con la finalidad de obtener información estadística en base a los datos de navegación. Si continúa navegando, se entiende que acepta su uso y en caso de no aceptar su instalación deberá visitar el apartado de información, donde le explicamos la forma de eliminarlas o rechazarlas.
Aceptar | Más información