Las mil y una noches:244

23/10/2009 1.151 Palabras

Las mil y una noches - Tomo II Y cuando llegó la 244ª noche de Anónimo Y CUANDO LLEGO LA 244ª NOCHE Ella dijo: "...pocas semanas nada más". Al oír estas palabras, el sabio persa dijo a Feliz-Bello, cuyo corazón se agitaba como un molino: "¡Hijo mío, prepara los remedios tal y cual, según la fórmula de Ibn-Sina artículo séptimo!". Entonces la dama se volvió hacia el adolescente, al cual empezó a mirar con mayor atención, para decirle a los pocos momentos: "¡Por Alah! ¡La enferma se te parece mucho, y su rostro es tan hermoso y dulce como el tuyo!" Después le dijo al sabio: "Dime, ¡oh noble persa! este joven ¿es hijo o esclavo tuyo?" El otro contestó: "Es mi hijo, ¡oh respetable! y tu esclavo". Y la anciana dama, muy halagada con tanta consideración, respondió: "¡Verdaderamente, no sé qué admirar más aquí, si tu ciencia, ¡oh médico sublime!' o tu descendencia!" Y siguió conversando con el sabio, mientras Feliz-Bello acababa de arreglar los...

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