La Revolución de Julio : 5

La Revolución de Julio Capítulo V de Benito Pérez Galdós Sigüenza, 20 de Abril.- Al reanudar con tanta distancia de espacio y tiempo estas vagas Memorias, mi primer plumada será para explicar por qué quedó interrumpida y suspensa la última hoja de lo que emborroné con fecha 9 de Febrero. A punto que me acercaba a la terminación de aquel escrito, fui sorprendido por una carta de Sigüenza que, con los emolientes de costumbre, me notificaba la muerte de mi buena madre. Días antes habíamos recibido carta de ella poco firme de pulso, en los conceptos vigorosa: sólo nos hablaba de sus inveterados alifafes sin importancia, y se mostraba gozosa, muy esperanzada de vernos pronto por allá. Como nada temía, la triste nueva fue para mí un escopetazo, y María Ignacia, que amaba a mi madre tanto como a la suya, se afectó en tal manera que la tuvimos ocho días en cama. Con el vivo dolor mío y la dolencia de mi mujer, imagínese qué gusto tendría yo para redactar...

Este sitio web utiliza cookies, propias y de terceros con la finalidad de obtener información estadística en base a los datos de navegación. Si continúa navegando, se entiende que acepta su uso y en caso de no aceptar su instalación deberá visitar el apartado de información, donde le explicamos la forma de eliminarlas o rechazarlas.
Aceptar | Más información