La lucha por la vida III: 112

VII 112 Pág. 112 de 127 La lucha por la vida III Tercera parte Pío Baroja Otra vez Roberto - La lucha por la vida - El regalo del inglés - El amor Una tarde, después de comer, estaba Manuel regando las plantas de su huertecillo, cuando se presentó Roberto. -¡Hola, chico!, ¿qué tal? ¿Estás de jardinero? -Ya ve usted. ¿Y la señorita Kate? -Muy bien. Allí, en Amberes, con su madre. Hemos hablado mucho de ti. -¿Sí? ¿De veras? -Te recuerdan con verdadero cariño. -Son muy buenas las dos. -Tengo ya un chico. -¡Hombre! ¡Cuánto me alegro! -Es un pequeño salvaje. Su madre lo está criando. ¿Y tus negocios? ¿Qué tal van? -No tan bien como yo quisiera; no le voy a poder devolver el dinero tan pronto como yo creía. -No importa. Cuando puedas. ¿Qué te pasa? ¿No marcha el negocio? -Sí, va muy despacio; pero, me matan los obreros socialistas. -¿Los socialistas? -Sí. Está uno atado de pies y manos. Las sociedades hacen ya en todos los oficios lo que...

Este sitio web utiliza cookies, propias y de terceros con la finalidad de obtener información estadística en base a los datos de navegación. Si continúa navegando, se entiende que acepta su uso y en caso de no aceptar su instalación deberá visitar el apartado de información, donde le explicamos la forma de eliminarlas o rechazarlas.
Aceptar | Más información