La lucha por la vida II: 102
V 102
Pág. 102 de 121
La lucha por la vida II Tercera parte
Pío Baroja
El calabozo del juzgado de guardia – Digresiones - La declaración
Al día siguiente de la muerte de su primo, Manuel compró con
ansiedad los periódicos; contaban todo lo pasado en el merendero; las
señas de cada uno de los comensales venían claras; se había identificado
el cadáver de Vidal, y se sabía que el asesino era el Bizco, un pájaro de
cuenta, procesado por dos robos, lesiones y presunto autor de una
muerte cometida en el camino de Aravaca.
El pánico de la Justa y de Manuel fue grandísimo; temían que les
considerasen complicados en el crimen, que les llamasen a declarar; no
sabían qué hacer.
Después de pensar mucho decidieron como lo más cuerdo mudarse de
casa e ir por los alrededores. Anduvieron la Justa y Manuel buscando
habitación, y la encontraron al fin en una casa de la calle de Galileo,
próxima al Tercer Depósito, en Vallehermoso.
La casa era barata, tres...
Está viendo el 12% del contenido de este artículo.
Solicitud de acceso
Solicite el acceso a su biblioteca para poder consultar nuestros recursos electrónicos.
Ventajas de ser usuario registrado.
ACCESO COMPLETO
Acceso sin restricciones a todo el contenido de la obra.
SIN PUBLICIDAD
Sólo información contrastada de prestigiosos sellos editoriales.
ACTUALIZACIÓN
Contenidos de renombrados autores y actualizaciones diarias.
La nueva plataforma del Consorcio ofrece una experiencia de búsqueda de fácil manejo y de gran usabilidad. Contiene funciones únicas que permiten navegar y realizar consultas de manera ágil y dinámica.
Convenios especiales:
Enseñanza
Bibliotecas públicas