La familia de Alvareda Segunda parte: 3

La familia de AlvaredaSegunda Parte Capítulo III de Fernán Caballero Segunda parte Capítulo III El gozo de Elvira fue tan corto como había sido vivo. ¿Qué puede escaparse a los ojos de la que ama? ¿No es sabido que hay cosas que, cual el viento de Guadarrama, son casi un soplo, y matan? Sin que Rita ni Ventura se hubiesen aún dado cuenta a sí mismos de la mutua seducción que uno sobre otro ejercían, Elvira ofrecía a Dios por segunda vez los dolores de su perdido amor; esta vez empero sin remota esperanza. Miraba la paciente y prudente Elvira un rompimiento como señal precisa de alguna catástrofe, y seguía como una mártir recibiendo, sin atreverse a rechazarlas, las frías muestras de un amor pálido y débil como ella, que se desvanecía a la viva llama de otro nuevo, que chispeaba ya activo, brillante y bello como lo era el objeto que lo inspiraba. Hacíanse las visitas en la reja cada noche más cortas y más frías. No había ocasión en que un gesto, una...

Este sitio web utiliza cookies, propias y de terceros con la finalidad de obtener información estadística en base a los datos de navegación. Si continúa navegando, se entiende que acepta su uso y en caso de no aceptar su instalación deberá visitar el apartado de información, donde le explicamos la forma de eliminarlas o rechazarlas.
Aceptar | Más información