Introducción a Richard Wagner

Los Wagner-Geyer eran gentes de teatro. Y en aquellos comienzos del siglo XIX las gentes de teatro no eran todavía bien vistas ni tenían un claro porvenir. Había algo de exótico, de marginal y de marginado en quienes pretendían comunicarse con los demás desde el escenario, en una época en que Napoleón estaba creando inestabilidad en una Europa que no acertaba a encontrar su propia identidad de cara a los tiempos nuevos, precipitadamente empujados por los vientos revolucionarios a desprenderse de los últimos residuos medievales. Richard Wagner no fue en modo alguno un niño prodigio, ni siquiera un niño precoz; todo lo contrario. Fue su vida una continua fuga hacia adelante, perseguida por una angustiosa mala suerte y por sus propios demonios personales. Niño de muchas cunas, inmerso en un mundo familiar precario, fue dominado por el elemento femenino y por una madre que se empeñó en reconducir hacia una realidad cotidiana de pura subsistencia, el presente y el futuro de...

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