Gloria: 11

Gloria Primera parte - Capítulo XI de Benito Pérez Galdós Un asunto grave Rafael del Horro vivía en la casa del cura, y todos los días, bien al almuerzo, bien a la comida, se personaba en casa de Lantigua, llevado del afán de hablar con Gloria. Una mañana antes de que el aguerrido campeón de Jesucristo pareciese por la casa, D. Ángel, que acababa de llegar con Gloria de la Abadía, donde había celebrado, dijo a esta: -Tu padre está en el jardín y quiere hablarte; ve. Gloria corrió al jardín, donde estaba don Juan en pie, con las manos a la espalda, inspeccionando los materiales que habían traído para componer la capilla. Fueron ambos a sentarse en un apartado y umbroso sitio que abrigaban corpulentas magnolias y otros árboles. Un sol tibio calentaba el jardín convocando en el espeso verdor de este toda la república de pájaros vecinos que entraban y salían por diversas partes jugando y charlando. D. Juan miró con afectuosos ojos a su hija, y le habló...

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