El sistema defensivo contra misiles, denominado National Missile Defense (NMD), consiste en un complejo entramado de comunicaciones, radares y cohetes que, según las previsiones del Pentágono, se encargará de detectar y destruir en vuelo cualquier misil o conjunto de misiles lanzados contra Estados Unidos (EEUU). El presidente George W. Bush (2000-2008) ha sido su impulsor desde que llegó a la Casa Blanca y para ello ha destinado numerosos millones de dólares para su despliegue. El programa tendrá un coste estimado superior a los 20 mil millones de dólares entre las tres etapas de que consta, desde 1998 a 2015. El proyecto nació en 1996 durante la Administración Clinton (1992-2000), pero ésta dejó en manos de su sucesora su puesta en marcha por los cuantiosos gastos que conllevaba su investigación y desarrollo. La idea de contar con un escudo espacial que hiciera invulnerable a Estados Unidos de supuestos ataques nucleares comenzó, sin embargo, en los ochenta, durante la...