En el muladar

En el muladar de Pedro Antonio de Alarcón  Mendigo: tu blasfemia me estremece...  Deja que olvide a Dios el venturoso;  pero tu labio hambriento y asqueroso  con renovada fe bendiga y rece:    Todo, menos su Dios, le pertenece  al opulento, sano y poderoso,  y el pobre, enfermo, triste y haraposo,  de todo, excepto de su Dios, carece    Dios es al cabo el único enemigo  del vano, del audaz, del sibarita,  y la sola esperanza, el solo amigo    del que llora, padece y necesita...  ¡Sin Dios, el universo se anonada!  ¡Sin Dios, el rico es Dios, y el pobre nada! Sonetos de Pedro Antonio de Alarcón A Carmen, al piano - A Pompeya - A Ronconi - A San Ramón Non Nato - A la bandera del batallón de Ciudad Rodrigo - A mis hijas en sus días - A... (Alarcón) - Adiós al vino - Al vino «Abolengo» de las bodegas de Misa (Jerez) - Chispas y...

Este sitio web utiliza cookies, propias y de terceros con la finalidad de obtener información estadística en base a los datos de navegación. Si continúa navegando, se entiende que acepta su uso y en caso de no aceptar su instalación deberá visitar el apartado de información, donde le explicamos la forma de eliminarlas o rechazarlas.
Aceptar | Más información