El Lazarillo de Manzanares: 23

El Lazarillo de Manzanares con otras cinco novelas El Lazarillo de Manzanares de Juan Cortés de Tolosa Capítulo XVI Cómo le quisieron casar. Pinta la novia y cómo se fue por ello huyendo de Sevilla Ara pues, mi bueno de mi amigo me trató un casamiento cuyos lances, plática y partes de la novia son del tenor siguiente: yo tenía por costumbre todas las mañanas llevar mis muchachos a San Pedro, que cerca de mi posada estaba, y oír misa con ellos haciendo que cada uno trajese rosario y le rezase, y no era de los peores arbitrios, de donde volvíamos a casa y cada uno se sentaba a su labor. Pues como un sábado fuese a lo que los días atrás acostumbraba, me hallé mi bueno de mi hombre con cara de casamentero, que es más feroz que de león, el cual me dijo: -A vuestra posada iba yo y me lo habéis escusado. ¡Vaya vuesa merced notando las necedades! ¡Ir a tratar cosa de tanta importancia a un hombre tan ocupado a aquellas horas que lugar de rascarse la cabeza no...

Este sitio web utiliza cookies, propias y de terceros con la finalidad de obtener información estadística en base a los datos de navegación. Si continúa navegando, se entiende que acepta su uso y en caso de no aceptar su instalación deberá visitar el apartado de información, donde le explicamos la forma de eliminarlas o rechazarlas.
Aceptar | Más información