David Copperfield - Segunda Parte - Capítulo VI

David Copperfield Segunda Parte: Capítulo VI de Charles Dickens No volví a ver a Uriah Heep hasta el día de la partida de Agnes. Había ido a las oficinas de la diligencia para decirle adiós, y me encontré con que también él se volvía a Canterbury en la misma diligencia que ella. Sentía como una pequeña satisfacción al ver su chaqueta raída, demasiado corta de talle, estrecha y mal hecha, en unión de su paraguas, que parecía una tienda de campaña, plantados en el borde del asiento, en la parte trasera de la imperial, mientras que Agnes, como es natural, tenía su asiento en el interior; pero bien me merecía aquella pequeña revancha, aunque sólo fuera por el trabajo que me costaba estar amable con él mientras Agnes podía vemos. En la portezuela de la diligencia, lo mismo que en la comida de mistress Waterbrook, rondaba a nuestro alrededor sin cansarse, como un gran vampiro, devorando cada palabra que yo decía a Agnes o que ella me decía a mí. En el estado...

Este sitio web utiliza cookies, propias y de terceros con la finalidad de obtener información estadística en base a los datos de navegación. Si continúa navegando, se entiende que acepta su uso y en caso de no aceptar su instalación deberá visitar el apartado de información, donde le explicamos la forma de eliminarlas o rechazarlas.
Aceptar | Más información