David Copperfield - Primera Parte - Capítulo XIII

David Copperfield Primera Parte: Capítulo XIII de Charles Dickens No sé nada; pero creo que pensaba seguir corriendo pasta Dover cuando renuncié a la persecución del muchacho del carrito y tomé el camino de Greenwich. En todo caso, mis ilusiones se desvanecieron pronto; me vi obligado a detenerme en la carretera de Kent, cerca de una terraza que adornaba una fuente con una gran estatua en el centro. Allí me senté en el umbral de una puerta, agotado por los esfuerzos que acababa de hacer, y tan sofocado, que apenas si tenía fuerzas para llorar, pensando en mi maleta y en mi media guinea. Se había hecho de noche, y mientras descansaba oí dar las diez en los relojes; pero era verano y hacía calor. Cuando recobré alientos y me tranquilicé emprendí de nuevo el camino de Greenwich. Ni por un momento se me ocurrió volverme atrás. No sé si se me hubiera ocurrido en el caso de encontrarme un precipicio en medio del camino. Pero la escasez de mis recursos (tenía tres...

Este sitio web utiliza cookies, propias y de terceros con la finalidad de obtener información estadística en base a los datos de navegación. Si continúa navegando, se entiende que acepta su uso y en caso de no aceptar su instalación deberá visitar el apartado de información, donde le explicamos la forma de eliminarlas o rechazarlas.
Aceptar | Más información