Apéndice 3. La electricidad en la era de las luces

DE todas las invenciones del hombre, hay dos que significaron los más grandes saltos en su historia: la imprenta y las maquinarias autoaccionadas. Junto a éstas, sólo es comparable en importancia el descubrimiento de la electricidad. A partir de ahí surgen otras promesas de frutos asombrosos que se expandirán en todas direcciones. El siglo XVIII es el siglo en que la imaginación cesa de divagar, en que los datos positivos se estabilizan lo bastante para hacer retroceder las fantasías de la especulación. Sin embargo, de Otto Guericke a Franklin, de Gilbert a Coulombs, no existe más que una progresión modesta. Al término de ésta los hechos principales de lo que se llama ordinariamente la electroestática, quedan claramente reconocidos. Sobre todo, porque en 1800, Volta realiza la primera pila eléctrica. Los físicos iban a tener a su disposición fuentes de corriente continua y de intensidad notable: apenas falta nada para que pueda nacer la electrodinámica. A partir de la...

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