A las niñas de Alcorcón

A las niñas de Alcorcón de Tirso de Molina A las niñas de Alcorcón le cantaba Paracuellos, mientras se juntan al bayle debaxo el olmo, estos versos: Fuérame yo por la puente, que lo es, sin encantamiento, en diziembre, de Madrid, y en agosto, de Ríoseco. La que haziéndose ojos toda por ver su amante pigmeo se quexa dél porque ingrato le da con la arena en ellos. La que la vez que se asoma a mirar su rostro bello es, a fuer de dama pobre, en sólo un casco de espejo. La pretina de jubón que estando de ojetes lleno cual pícaro, no trae más que una cinta en los gregüescos. Por esta puente de anillo pasé un disanto, en efecto, aunque pudiera a pie enjuto vadear su mar Bermejo. Reíme de ver su río, y sobre los antepechos de su puente titular no sé si le dixe aquesto: No os corráis, el Manzanares; mas ¿cómo podréis correros, si llegáis tan despeado y de gota andáis enfermo? Según arenas criáis, y estáis ya caduco y viejo, moriréis de mal de...

Este sitio web utiliza cookies, propias y de terceros con la finalidad de obtener información estadística en base a los datos de navegación. Si continúa navegando, se entiende que acepta su uso y en caso de no aceptar su instalación deberá visitar el apartado de información, donde le explicamos la forma de eliminarlas o rechazarlas.
Aceptar | Más información